Conclusiones del Informe de Coyuntura Socioeconómica, Septiembre 2023
Puede acceder al informe completo a través del siguiente enlace: Septiembre 2023
La economía española y la de Canarias se enfrentan a una coyuntura marcada por una serie de retos que, a buen seguro, ralentizarán el crecimiento a medio y largo plazo, en un contexto económico mundial que sigue constatando un enfriamiento generalizado en las principales economías del planeta, y acusando la persistencia de las tensiones geopolíticas internacionales derivadas de la guerra entre Ucrania y Rusia, a lo que se ha unido recientemente la escalada de violencia en el conflicto entre Israel y Hamás, con notables implicaciones económicas aún difíciles de determinar.
No en vano, ya se reflejan los efectos en los mercados financieros, y los inversores vuelven a apostar cada vez más por recurrir a activos refugio ante el temor a que se prolongue la situación, además de incrementarse la incertidumbre en torno a la evolución de los precios de las materias primas.
En este sentido, en el caso concreto del petróleo, la tendencia alcista de los precios que se había observado desde los meses de verano se ha mantenido en el mes de septiembre, hasta alcanzar los 94,8 dólares por barril de Brent, mostrando niveles que no se veían desde los últimos meses de 2022, lo que podría verse recrudecido por la intención de los principales países exportadores de seguir recortando la producción y por las mayores presiones de algunos productores como Irán, ante el conflicto entre Israel y Hamás.
En cualquier caso, en este escenario, el FMI acaba de publicar su último informe sobre las previsiones de la economía mundial. Si bien, estas previsiones aún no recogen las posibles repercusiones del nuevo conflicto bélico, sí nos permite visualizar la tendencia de desaceleración que viene describiendo la actividad económica global.
Así, el Fondo Monetario ha puesto énfasis en el enfriamiento que evidencian las principales economías ante el continuo endurecimiento de la política monetaria, manteniendo invariable en un 3,0% su previsión de crecimiento mundial para 2023, y revisándola a la baja en una décima para 2024, hasta el 2,9 por ciento.
En el caso de la Eurozona, el FMI ha moderado sus perspectivas para 2023 en dos décimas, estimando un avance del PIB del 0,7%; al tiempo que, para 2024, redujo su proyección previa en tres décimas, hasta el 1,2%, dada su exposición a los “shocks” de oferta en los mercados energéticos, y en la que su principal motor industrial, Alemania, continúa inmerso en las dificultades de la coyuntura económica actual.
Por otra parte, el Fondo prevé que la economía china ralentice su crecimiento entre 2023 y 2024, con aumentos del PIB del 5,0% y del 4,2%, respectivamente, lo que supone sendas rebajas de dos y tres décimas, en cada caso, en un escenario de empeoramiento de la crisis inmobiliaria.
En cambio, en Estados Unidos, la economía sigue mostrando una resiliencia inesperada, gracias a la evolución de la demanda interna, con lo que el FMI ha mejorado la previsión de crecimiento del PIB norteamericano para 2023 en tres décimas, y en cinco para 2024, con tasas del 2,1% y del 1,5 por ciento.
En materia de política monetaria, la Reserva Federal mantuvo los tipos de interés en el intervalo 5,25%-5,50% en su última reunión en septiembre. No obstante, no se descarta un aumento adicional de aquí a final de año o al inicio de 2024, respaldándose en los buenos datos macroeconómicos que viene presentando la economía estadounidense.
En el caso de España, el FMI mantuvo su previsión de que el PIB español culminará 2023 con un incremento del PIB del 2,5%, una proyección muy similar a la que ha incluido el Gobierno de nuestro país en el Plan Presupuestario remitido a la Comisión Europea en los últimos días, cifrada en el 2,4 por ciento.
Sin embargo, la previsión del Ejecutivo para 2024 resulta más optimista que la del FMI (pese a haberla rebajado en cuatro décimas), situándola en el 2,0%, frente al 1,7% que estima la institución internacional para el conjunto del próximo año (tres décimas menos que en el informe anterior).
Pese a que se espera que el crecimiento de España se mantenga por encima de la Zona euro, los principales indicadores económicos manifiestan una pérdida de dinamismo en la actividad de nuestro país, toda vez que los datos más recientes sobre el consumo interno y el empleo muestran valores, aunque positivos, más moderados que los que se constataban a lo largo del primer semestre del año.
En este sentido, el índice PMI manufacturero continúa en territorio contractivo, evidenciando la debilidad de la industria manufacturera; mientras que, por el contrario, el PMI de la actividad de los servicios retornó a la senda expansiva en el mes de septiembre (situándose por encima de los 50 puntos), tras los malos resultados apuntados en agosto.
Asimismo, pese a que se espera que la deuda pública española se reduzca con respecto al PIB al cierre del año, es importante recordar que, en términos nominales, sigue creciendo, al igual que sucede con los costes para su financiación, no en vano, el rendimiento del bono español a diez años se sitúa ya por encima del 4% en el mes de octubre.
En lo referente a la inflación de nuestro país, los últimos resultados muestran que el IPC aumentó un 0,2% mensual en septiembre, al abrigo del repunte apreciado, sobre todo, por el grupo “Vestido y calzado”, del orden del 2,6%, aunque los precios de los alimentos también crecieron, si bien, de forma más moderada (+0,5%).
No obstante, en el caso de Canarias, el encarecimiento del 1,8% apuntado por el grupo de la alimentación elevó la inflación por encima de la media nacional, hasta el 0,3% mensual, acusando el notable incremento observado en las Islas por los precios de productos frescos no elaborados como las papas (+27,2%) y las legumbres y hortalizas (+14,7%), y su mayor peso dentro del índice general.
Por lo que se refiere a los componentes energéticos, tanto los carburantes (Nacional +2,4%; Canarias +2,8%), como la electricidad (Nacional +0,9%; Canarias +1,2%) continúan mostrando una tendencia alcista en comparación con el mes inmediatamente anterior.
En términos interanuales, el efecto “escalón” que venían mostrando los productos energéticos en los meses anteriores, comienza a moderarse, y se espera que su impacto se vaya disipando a lo largo de los próximos meses. En este sentido, el IPC del conjunto nacional aceleró su crecimiento hasta el 3,5%, al tiempo que en las Islas, los precios crecieron un 4,3%, en relación con el resultado apuntado en septiembre de 2022.
En todo caso, el mayor aumento de los precios en el Archipiélago en el último año responde al encarecimiento del 13,5% anotado por los alimentos, superior a la media del Estado (+10,5%), y al comportamiento dispar de los precios de los combustibles, que en Canarias aumentaron un 0,2%, al contrario que en el ámbito nacional, donde describieron una caída del 0,2 por ciento.
Por su parte, la inflación subyacente se moderó en ambos ámbitos geográficos, tanto en términos mensuales, con minoraciones del 0,1% en el conjunto de España y del 0,3% en las Islas; como interanuales, aunque en este caso, aún alcanza niveles elevados, anotando alzas respectivas del 5,8% y del 5,6 por ciento.
Trasladando ahora nuestro análisis al mercado laboral, los datos más recientes de la afiliación a la Seguridad Social indican que los servicios (+320.798 afiliados) mantuvieron el nivel de empleo en valores elevados al término del mes de septiembre en nuestro país, que culminó con un total de 20.800.895 trabajadores en alta laboral, lo que implica un repunte mensual del 1,8%, esto es, 370.623 efectivos adicionales.
En términos interanuales, también se observó un crecimiento, en este caso, del 3,7%, con 747.376 efectivos más que en septiembre de 2022.
Centrándonos ahora en el ámbito de las Islas, Canarias también vio incrementar las cifras de empleo con respecto al mes inmediatamente anterior, anotando un ascenso más intenso, en términos relativos, que en el conjunto del Estado, cifrado en un 3,0%, 25.740 empleos más que en agosto, hasta totalizar 891.437 trabajadores inscritos.
Los servicios aglutinaron la práctica totalidad de la creación de empleo, con 24.790 nuevas altas en la Seguridad Social, siendo la “Educación” la más destacada, con un notorio avance de 13.312 efectivos adicionales, coincidiendo con el inicio del curso escolar; seguida de la “Hostelería” y las “Actividades administrativas y servicios auxiliares”, con respectivos ascensos mensuales de 2.888 y 2.791 trabajadores.
Desde un enfoque interanual, el Archipiélago también computó un crecimiento del 4,7%, sumando 39.737 afiliados a los registrados en idéntico mes del ejercicio precedente.
Por lo que concierne a las cifras de paro registrado, se observó una evolución diferenciada en el transcurso del mes de septiembre, toda vez que el conjunto del territorio nacional incrementó sus registros un 0,73%, 19.768 desempleados adicionales; mientras que, por el contrario, el paro en Canarias se contrajo un 1,64%, lo que se traduce en 2.831 individuos menos que en el mes previo.
Por el contrario, en términos interanuales, ambos territorios describieron minoraciones relativas, aunque en Canarias resultó más acusada, del orden del 9,84% (-18.563 parados), que en el conjunto nacional, donde se apuntó un descenso del 7,46% (-219.451 desempleados), en relación con el mes de septiembre de 2022.
Pasando a analizar el comportamiento de la actividad turística en el Archipiélago, no se debe perder de vista que el ritmo que ha descrito el sector en los últimos meses podría moderarse a raíz de los síntomas de debilidad que muestran los mercados emisores europeos, especialmente en el caso del país germano y el Reino Unido, en un contexto de estancamiento de la economía europea.
Las últimas estadísticas proporcionadas por AENA indican que la entrada de viajeros a Canarias desde el extranjero apuntó en el noveno mes del año una minoración mensual del 5,0%, lo que equivale a 54.077 visitantes foráneos menos que en agosto, hasta contabilizar un total de 1.023.019 viajeros.
Pese a ello, en términos interanuales, la llegada de turistas superó en un 7,4% las visitas de septiembre de 2022, lo que se traduce en 70.092 visitantes más. Además, con respecto a las cifras prepandemia, también se aprecia un repunte, del orden del 7,6%, con 72.640 viajeros más que los registrados en el mismo mes de 2019, cuando se contabilizó un total de 950.379 visitantes foráneos.
Tomando como referencia cifras acumuladas, se evidencia que Canarias anota un total de 10.093.227 visitantes desde el extranjero en lo que va de año, lo que supone un avance del 13,5%, 1.199.286 viajeros adicionales con respecto a los primeros nueve meses de 2022.
En síntesis, la coyuntura internacional se encuentra envuelta en un contexto de incertidumbre geopolítica, en el que los conflictos bélicos han incrementado los niveles de incertidumbre que ya acusan las economías, muy condicionadas por los componentes de la inflación que aún siguen en valores elevados y por los altos tipos de interés.
Asimismo, las perspectivas de la economía nacional y de las Islas se ven también comprometidas por otros factores como la inestabilidad política y la falta de certeza sobre la formación de Gobierno para la nueva legislatura tras las últimas elecciones generales, máxime, teniendo en cuenta que durante esta se abordará la nueva reforma sobre el sistema de financiación autonómica y volverán a ser efectivas las reglas fiscales europeas.
Por otro lado, y a pesar de los resultados que muestra el mercado de trabajo, es importante tener en cuenta el desacople que existe entre demanda y oferta de trabajo, dificultando que las empresas encuentren la mano de obra que precisan, por lo que resulta esencial potenciar la formación y la actualización de las cualificaciones profesionales de los trabajadores, atendiendo las necesidades del mercado y las demandas de los distintos sectores económicos.