Conclusiones del Informe de Coyuntura Socioeconómica, Noviembre de 2014
* Puede acceder al texto íntegro del Informe a través del siguiente enlace Informe noviembre 2014
La economía mundial afronta el cierre del ejercicio en un escenario en el que no terminan de disiparse las dudas que sobrevuelan sobre algunas economías desarrolladas, especialmente en Japón y en países europeos como Francia, Holanda o Italia, al tiempo que en algunas economías emergentes crecen los riesgos derivados de su situación geopolítica, de las expectativas de normalización de las políticas monetarias de la Reserva Federal o, en el caso de países productores de petróleo, del impacto que causará sobre sus balanzas corrientes el descenso en la cotización del barril, que se sitúa ya en el entorno de los 60 dólares.
Las consecuencias de la fuerte bajada del petróleo ya comienzan a afectar de forma clara en potencias emergentes como Rusia, donde esta situación ha acelerado abruptamente la tendencia de depreciación del rublo y ha propiciado una fuerte salida de capitales, que está intentando ser contenida, de momento sin mucho éxito, con un fuerte incremento de los tipos de interés desde el 10,5% al 17 por ciento.
En este contexto, en Europa, el Banco Central Europeo ha mantenido recientemente los tipos de interés en el mínimo histórico del 0,05% y se ha reafirmado en su compromiso de impulsar medidas de política monetaria no convencionales, abriendo incluso la posibilidad de adquirir prácticamente cualquier tipo de activo.
Se trata de un nuevo intento de la máxima institución monetaria europea para combatir la situación de estancamiento prolongado de la eurozona, siendo este el principal riesgo al que se enfrenta un área en la que los resultados para 2014 no pasan de modestos.
Sin embargo, y a pesar de los riesgos latentes, la trayectoria a la baja de los precios del petróleo tiene una clara contrapartida positiva para los países europeos, en su amplia mayoría importadores netos de petróleo, para los que una situación prologada de cotizaciones en el entorno de los 60 euros puede contribuir a estimular su crecimiento, según el FMI, hasta en 8 décimas de PIB.
Asimismo, el procedimiento de la Unión bancaria europea comienza a surtir efecto y reducir la fragmentación de los mercados financieros, algo ya visible en la evolución del coste de la deuda soberana de países como España, que se sitúa en el entorno de los 120 puntos básicos.
Permite también una lectura relativamente optimista el punto de partida en el que se encuentra Alemania, donde parece previsible un crecimiento de la demanda interna a la vista de su situación cercana al pleno empleo, a los incrementos salariales implementados en 2014 y al contexto de tipos de interés reales negativos, que deberían impulsar su consumo.
Este país no se encuentra, sin embargo, exento de factores que puedan frenar su crecimiento, como la caída de la inversión empresarial o la persistencia de amenazas externas, provenientes fundamentalmente de la situación en Ucrania y de los riesgos políticos que se derivan de países del área del euro como Grecia.
Mientras, los resultados macroeconómicos referidos a España invitan a mirar hacia el futuro con mayor optimismo, lo que está conduciendo a una revisión al alza de las previsiones de crecimiento, tanto las referidas al último trimestre del año, como para 2015.
Según el servicio de estudios del BBVA, la economía española crecerá entre el 0,6% y el 0,7% en el cuarto trimestre de 2014, lo que supone una aceleración con respecto al tercero cuando el PIB aumentó en nuestro país a razón de un 0,5 por ciento.
Según este servicio de estudios, la mejora de la actividad estuvo además acompañada de una intensificación en la creación de empleo, estimándose una previsión de 435.000 empleos en el balance de 2014.
En la misma línea, FUNCAS ha revisado recientemente en dos décimas sus anteriores estimaciones de crecimiento para 2015, hasta el 2,5 por ciento.
Otro dato destacado resulta de la disminución de los costes de financiación para las empresas en España, que han caído durante los últimos meses a mínimos históricos, con descensos hasta octubre -último dato disponible- de casi el 40% con respecto a enero de 2014.
El coste del crédito empresarial se acerca a valores medios europeos, lo que resulta una señal más de esta menor fragmentación de los mercados financieros de la eurozona.
En el ámbito de Canarias, las últimas estimaciones de crecimiento referidas al tercer trimestre del año que acaba de hacer públicas el Instituto Canario de Estadística, cifran el avance del PIB de las Islas en un 1,9 por ciento.
A tenor de estos resultados, la economía canaria ha crecido a un ritmo más intenso que el conjunto del territorio nacional, donde el PIB registra un incremento del 1,6% interanual, confirmándose el dinamismo de las actividades del sector servicios como factor fundamental que impulsa el crecimiento de la economía canaria.
En este sentido, el VAB de los servicios ha aumentado un 2,5% durante el último año, un ritmo de crecimiento que resulta más elevado que el registrado en el ámbito nacional, donde este mismo sector experimentó un avance interanual del 1,6 por ciento.
El buen comportamiento de los servicios en Canarias ha permitido compensar los resultados aún no tan favorables que continúan mostrando el resto de los sectores de actividad.
Además de la agricultura, donde se ha registrado un descenso del VAB del 1,9% en términos interanuales, el valor añadido bruto en la construcción y en la industria también ha descendido en comparación con los datos de hace un año, registrando sendos descensos interanuales que alcanzan el 1,7% y el 0,5%, respectivamente.
De cara al último trimestre del año, en el que ya nos encontramos inmersos, la evolución de los indicadores que resultan clave para aproximar el comportamiento de la demanda interna en Canarias, como son el comercio al por menor, la matriculación de vehículos, la entrada de visitantes foráneos, o la actividad portuaria, apuntan nuevas variaciones positivas en la demanda de las Islas.
En este sentido, vuelve a observarse un comportamiento creciente en el índice del comercio al por menor, al cerrar el mes de octubre superando en un 6,0% el dato de hace un año.
Asimismo, la matriculación de vehículos también se mantiene al alza, al superar en un 40% el dato contabilizado en octubre de hace un año, mientras que el volumen de tráfico portuario cierra ese mismo mes con un incremento interanual del 25,6%, en respuesta al aumento de las mercancías descargadas que han superado en más de un 30% el dato de hace un año.
Mientras, el desempleo en Canarias encadena, en el mes de noviembre un nuevo retroceso interanual, cifrado en esta ocasión en un 6,35 por ciento, en un contexto en el que el número de afiliados al conjunto del Sistema de la Seguridad Social, a último día del mes, se incrementa en un 3,03%, superando así en 20.197 afiliados el registro del mismo mes del año anterio.
De esta manera, el mercado laboral canario sigue confirmando la senda de recuperación iniciada a partir de la segunda mitad de 2013, donde destaca el papel de la actividad turística, que junto con la incipiente mejora del consumo, están induciendo al crecimiento del empleo en los servicios.
En lo referente a la actividad turística, y pese a que durante el pasado mes de noviembre se ha registrado un descenso interanual en el número de turistas extranjeros que han llegado a Canarias del 2,4%, se ha vuelto a superar el millón de turistas recibidos en un mes.
En términos acumulados, en cambio, el dato registrado hasta noviembre supone un crecimiento de la demanda del 9,8% en comparación con el mismo dato de hace un año, lo que implica un volumen de visitantes que supera ya los 10,4 millones de turistas.
Por lo que se refiere la evolución de los precios de consumo, el IPC en las Islas experimentó un descenso mensual del 0,1% durante el pasado noviembre, un dato idéntico al registrado en el conjunto del territorio nacional.
La bajada de precios en la electricidad (-2,6%) y el abaratamiento de los combustibles (-2,5%) explican que Vivienda y Transportes hayan destacado como los grupos que más han acusado la caída de precios al registrar tasas de variación negativas del 1,1% y del 1,2%, respectivamente.
También descendían los precios, aunque con un tono más moderado, en el ámbito de Ocio y cultura, además de la alimentación.
En cambio, los precios aumentaban en el resto de los grupos, y de manera destacada en el grupo de Vestido y calzado que registraba un repunte al alza del 4,2 por ciento.
No obstante, el estudio más en detalle de los precios permite apreciar que, pese al descenso observado en el Índice general, la inflación subyacente, aquella que descuenta del índice general el efecto de los alimentos no elaborados y los productos energéticos, apróximándose en mayor medida a la respuesta de los precios a la evolución del consumo, ha experimentado un avance positivo durante el pasado mes de noviembre.
Descontando, precisamente la caída de los combustibles y el efecto de los alimentos, los precios en Canarias han subido un 0,4%, al igual que el conjunto del territorio nacional, y ello pone de manifiesto una mejora relativa en la demanda interna por el lado del consumo.
Todos estos resultados dotan de mayor robustez a la demanda interna de las Islas y confirman el escenario de progresiva recuperación en el que viene estando inmersa la economía canaria desde prácticamente el inicio del segundo semestre de 2013. Sin embargo, resta aún un largo camino por recorrer, siendo necesario redoblar los esfuerzos, públicos y privados, para impulsar la recuperación de la inversión productiva como eje tractor del crecimiento de la actividad y la creación de empleo.