Conclusiones del Informe de Coyuntura Socioeconómica, Mayo 2024
Puede acceder al informe completo a través del siguiente enlace: Mayo 2024
La actividad global continúa inmersa en un escenario de incertidumbre y desaceleración económica, condicionada por el incremento de la inestabilidad en el ámbito geopolítico y por las condiciones financieras poco favorables, derivadas de unos tipos de interés que se mantienen elevados y una inflación que persiste en valores superiores a los de referencia.
Sin embargo, a punto de finalizar el primer semestre del año, los indicadores de actividad más recientes parecen indicar un desempeño mejor de lo esperado para esta primera mitad de 2024, mostrando cierta resiliencia frente a los condicionantes adversos que continúan impactando en el panorama internacional; y comienzan ya a apreciarse los primeros signos de atenuación de la política monetaria en algunos lugares.
Si bien, se evidencia cierta disparidad en las dinámicas de las economías más relevantes del planeta, toda vez que Estados Unidos ha constatado una desaceleración más intensa de lo previsto inicialmente en el primer trimestre del año; mientras que la Eurozona, más castigada por las contingencias coyunturales desde el pasado ejercicio, ha mostrado ciertas señales de mejora en su evolución más reciente.
En este sentido, y profundizando en la economía estadounidense, la última revisión de los datos del PIB trajo consigo una rebaja del crecimiento del primer periodo del año, hasta el 0,3% -tras haber cerrado el cuarto trimestre de 2023 con un alza trimestral del 0,8%-, fruto de la pérdida de fuerza del consumo y de las exportaciones.
En cambio, la Eurozona parece haber mostrado un mejor rendimiento de lo esperado, y las últimas revisiones han confirmado el dato de crecimiento del primer trimestre del año, que se saldó con un alza trimestral del PIB del 0,3%, tras culminar el periodo anterior en valores negativos (-0,1%).
En cualquier caso, debemos recalcar que el entorno comunitario sigue adoleciendo de unos mayores niveles de fragilidad con respecto a otras economías, por lo que los resultados deberán tomarse con la debida cautela, a la espera de que el crecimiento se confirme en el transcurso del año, máxime, si la economía alemana sigue enfrascada en este contexto de bajo dinamismo.
En este escenario, el Banco Central Europeo ha estimado que el PIB de la Zona del Euro saldará el presente año con un crecimiento del 0,9%, mejorando en tres décimas su previsión anterior; al tiempo que sitúa el alza para en 2025 en el 1,4% (una décima menos).
Por otra parte, y en materia monetaria, habrá que prestar especial atención al comportamiento de la inflación norteamericana, que volvió a moderar su crecimiento en el mes de mayo, pese a lo cual, la Reserva Federal ha mantenido sin cambios el discurso tras su última reunión de junio, a la espera de que los precios sigan moderándose y se sitúen en valores cercanos al objetivo.
En sentido contrario, el Banco Central Europeo ha implementado ya en el mes de junio su primera bajada de los tipos de interés, concretamente, de 25 puntos básicos, situando el tipo de referencia en el 4,25%, como respuesta a los buenos resultados que ha venido describiendo el IPC en los últimos meses, con una moderación de más de 2,5 puntos porcentuales desde su reunión de septiembre de 2023.
A pesar de ello, la institución monetaria sigue recalcando que las presiones inflacionistas internas continúan siendo elevadas, como consecuencia del fuerte crecimiento salarial, por lo que estima que el IPC seguirá situándose por encima de los valores de referencia hasta bien entrado 2025.
Así, el BCE ha revisado al alza sus previsiones de inflación, y estima que los precios culminen 2024 con un aumento del 2,5% (dos décimas más), y 2025 con un alza del 2,2% (dos décimas adicionales).
Por otro lado, China sigue exhibiendo un desempeño dispar, en el que la producción industrial continúa manteniendo el impulso de la economía, aunque por debajo de lo esperado, al tiempo que la demanda interna muestra ciertos signos positivos.
Habrá que prestar atención a su evolución en los próximos meses, y no perder de vista, además, las consecuencias del anuncio de la Comisión Europea de la aplicación de nuevos aranceles a la importación de coches eléctricos procedentes de China, que podrían llegar a situarse, incluso, en el 48 por ciento.
Trasladando el foco de atención a la economía de nuestro país, y en relación con las previsiones más recientes, el Banco de España ha revisado al alza en cuatro décimas el crecimiento del PIB para 2024, hasta el 2,3%, en un escenario en el que el sector terciario, especialmente el turismo, y los buenos resultados del empleo, han llevado a la economía española a mostrar un comportamiento mejor de lo esperado en lo que va de ejercicio.
Para 2025, no obstante, el Banco de España mantiene su proyección de que la economía española se desacelerará hasta el 1,9 por ciento.
En lo que concierne a los datos de inflación del mes de mayo, se observa que los precios moderaron su crecimiento hasta el 0,3% en el conjunto del Estado, al tiempo que en Canarias constataron un alza del 0,1% mensual al cierre del quinto mes del año.
Los precios de los alimentos se mantuvieron sin variación con respecto al mes anterior en los dos ámbitos territoriales, si bien, el grupo “Restaurantes y hoteles” describió un descenso mensual del 0,2% en las Islas, debido a la temporada baja turística; a diferencia de la media nacional, que mostró un alza del 0,7 por ciento.
Sin embargo, el incremento más intenso de la electricidad en el Archipiélago (Canarias +2,3%; España +1,7%) llevó a los precios del grupo de bienes y servicios relacionados con la “Vivienda” a elevarse un 0,9% en las Islas (+0,8% en el conjunto del país).
En términos interanuales, los precios crecieron más a escala nacional (+3,6%) que en el Archipiélago (+3,4%), lo que no sucedía desde el mes de octubre de 2022.
A pesar de que los precios de los alimentos mostraron una destacada moderación, este volvió a ser el grupo que tuvo un mayor impacto en el alza interanual del IPC, constatando crecimientos del 5,3% en Canarias y del 4,4% a escala estatal; tras el que se situó “Restaurantes y hoteles”, con un incremento del 5,5% en el Archipiélago y del 5,2% en el ámbito nacional.
Destacó también la evolución de los precios de “Vivienda”, que cerraron el mes de mayo con un ascenso del 4,9%, tres décimas menor que el anotado en el ámbito nacional (+5,2%), a pesar de que la factura eléctrica se encareció más en el Archipiélago (+12,6%) que en el conjunto del país (+8,8%).
Por su parte, la inflación subyacente se moderó en cinco décimas, en términos mensuales, en Canarias (+0,1%) y tres décimas en el conjunto del Estado (+0,3%); mientras que en relación con el mes de mayo de 2023, esta se mantuvo en el 2,8% en el Archipiélago, y se incrementó un 3,0% en el ámbito nacional (una décima más que en abril).
Pasando ahora a analizar la evolución más reciente del mercado laboral, las últimas estadísticas de afiliación a la Seguridad Social indican que el empleo en el conjunto del país culminó el quinto mes del año con un ascenso mensual del 0,6%, esto es, un crecimiento de 136.425 trabajadores adicionales.
En términos interanuales, la media nacional también mostró un comportamiento positivo, anotando, en este caso, un incremento del 2,4%, sumando 504.034 efectivos a sus cifras de afiliación, al cierre del pasado mes de mayo.
Por su parte, las Islas también aumentó el empleo, si bien, en términos mensuales, este incremento fue más moderado que el evidenciado a escala estatal, toda vez que se registró un alza mensual del 0,2%, lo que equivale a 2.003 afiliados más.
Los aumentos más destacados en Canarias se localizaron en los “Transportes” y en “Sanidad”, incorporando 1.046 efectivos más en el primer caso, y 1.037 trabajadores adicionales en el segundo.
Desde un enfoque interanual, el Archipiélago constató un avance relativo del 3,5%, que resultó más intenso que el apuntado por la media estatal (+2,4%), lo que se traduce en 30.445 efectivos más.
En este caso, fueron las ramas de la “Hostelería” y “Sanidad” las que mostraron los incrementos más notables en Canarias, registrando 8.788 y 5.808 afiliados más que en mayo de 2023.
Asimismo, destacaron el “Comercio” (+3.569 trabajadores más), las “Actividades administrativas y servicios auxiliares” (+3.220 efectivos adicionales) y los “Transportes” (+3.022 afiliados más).
En cuanto los datos de paro registrado, tanto el conjunto de España como las Islas apuntaron minoraciones mensuales, aunque la intensidad de la caída resultó mayor en el ámbito nacional, cifrada en un 2,20% (-58.650 desempleados), que en nuestra región, donde el desempleo se aminoró un 0,84% (-1.404 parados).
En cambio, desde un enfoque interanual, el paro se redujo de forma más intensa en las Islas, con un descenso del 5,94% (-10.488 desempleados), frente a la contracción del 4,79% (-131.260 parados) observada en el contexto nacional.
Analizando a continuación las estadísticas acerca de la entrada de viajeros desde el extranjero a las Islas, observamos que, según la última publicación de AENA, Canarias recibió un total de 1.046.918 visitantes foráneos a lo largo del mes de mayo, lo que implica una caída mensual del 11,5%, esto es, 136.635 turistas menos, en el contexto de la temporada baja de la actividad turística.
En términos interanuales, por el contrario, se constató un avance del 8,0%, 77.779 viajeros más que en mayo de 2023.
Además, si atendemos a las cifras acumuladas y comparamos los datos con los observados en 2019, se aprecia que a lo largo de los cinco primeros meses del presente año, Canarias contabiliza 841.960 viajeros más que antes de la pandemia, lo que equivale a un alza del 14,7 por ciento.
En síntesis, las Islas continúan mostrando resultados positivos en los niveles de actividad y empleo, en un contexto en el que la inflación mantiene la senda de la moderación, incluso en el caso de la componente subyacente.
Sin embargo, en el panorama actual nos enfrentamos a una serie de retos y riesgos que, de no resolverse, seguirán condicionado el desempeño de nuestra economía, por lo que consideramos fundamental que se adopten medidas que no distorsionen y dificulten más el desarrollo de la actividad económica, sino que fomenten la mejora de la competitividad de nuestras empresas y no supongan costes adicionales, y que sirvan para generar la confianza suficiente para elevar los niveles de inversión, tanto privada como externa.