Conclusiones del Informe de Coyuntura Socioeconómica, Junio 2023
Puede acceder al informe completo a través del siguiente enlace: Junio 2023
El contexto económico internacional continúa inmerso en una fase de desaceleración debido a los efectos derivados de la incertidumbre que aún generan las tensiones geopolíticas por el conflicto bélicto entre Rusia y Ucrania, y el impacto del endurecimiento de la política monetaria en la mayoría de las economías desarrolladas.
No obstante, cabe destacar que los elevados niveles en los que ha permanecido la inflación desde mediados de 2021, parecen haber comenzando a consolidar la moderación de los últimos meses en lo que atañe a la inflación general, así como, en menor medida y de una manera todavía muy incipiente, en la subyacente.
Durante el pasado mes de junio, los precios de consumo en buena parte de las economías avanzadas se situaron en niveles sensiblemente inferiores a los registrados durante los meses anteriores, si bien es cierto que es este un fenómeno que se debe, en buena parte, al efecto base o “escalón” que subyace de la comparativa con los elevados niveles en los que permanecieron los precios energéticos el pasado año.
No en vano, buena parte de la moderación que ha observado la inflación durante los últimos meses responde a la corrección que han descrito los componentes energéticos, en particular la electricidad y los carburantes, tras los máximos históricos que observaron sus precios a lo largo del segundo y el tercer trimestre de 2022 y que a buen seguro seguirán contribuyendo a la baja durante los próximos meses.
Este comportamiento de la inflación también está teniendo reflejo en España, en donde el IPC de junio volvió a moderar su crecimiento, en términos interanuales, hasta un alza del 1,9%, frente al 3,2% que registró en mayo, altamente condicionado por el efecto base anteriormente descrito.
En lo que atañe a Canarias, y aunque los precios también se moderaron durante el mes de junio, lo hicieron en menor medida y situándose por encima de la media nacional, con un avance del 3,9% (1 punto menos que en mayo, +4,9%).
Los precios en las Islas muestran una mayor resistencia a la baja debido al mayor encarecimiento que han mostrado los alimentos, y a una caída más moderada de los precios de los bienes y servicios relacionados con la vivienda y los transporte.
Entre junio de 2022 y junio de 2023, el precio de los carburantes se redujo en Canarias un 8,1% y la electricidad lo hizo en más de un 34,0%, lo que explica que los grupos relacionados con la “vivienda” y los “transportes” hayan visto aminorar sus precios en el último año un 9,4%, en el primer caso, y un 1,1%, en el segundo.
En el contexto nacional, estos mismos grupos también vieron reducir los precios, aunque lo hicieron con mayor intensidad, registrando descensos que alcanzaron el 12,7% en el caso de “vivienda”, y el 7,6%, en el caso de “transportes”.
No obstante, y pese a estas caídas, los precios en el resto de los grupos que conforman el IPC han continuado al alza, sobre todo, en el caso de “Alimentos y bebidas no alcohólicas”, que se incrementaron con respecto a junio de 2022 un 12,8% en Canarias, superior al registrado en el contexto nacional, donde se elevaron un 10,3 por ciento.
En este contexto, la inflación subyacente en Canarias se situó en el 6,2% en Canarias, cuatro décimas menos que en mayo, aunque todavía por encima de la media estatal (+5,9%), y del índice general de precios, lo que evidencia que la tendencia a la baja de la inflación responde a la corrección de los precios energéticos y no a una contención general de los precios de consumo.
Las previsiones apuntan a que los Bancos Centrales mantendrán el tono restrictivo de su política monetaria durante el resto del año, especialmente en la Eurozona, en donde se espera que el BCE vuelva a subir en 25 pb los tipos de interés en su reunión de julio, hasta situarlos en el 4,0%, y que seguirá reduciendo sus balances.
Atendiendo ahora a los principales indicadores de actividad económica, los tres principales bloques económicos del planeta, China, Estados Unidos y la Eurozona, han continuado ralentizando su crecimiento, tendencia que se prevé se acentúe en el segundo semestre del año, una vez comiencen a denotarse en mayor medida los efectos del endurecimiento monetario sobre la economía real, especialmente en lo que atañe al consumo y la inversión.
En este sentido, si tomamos como referencia los resultados del PMI compuesto de bienes y servicios del mes de junio, estas tres potencias desaceleraron sus niveles de actividad con fuerza, llegando incluso, en el caso de la Eurozona, a entrar en la zona contractiva del indicador.
Este último dato se encuentra influenciado por la debilidad en la que permanece la actividad manufacturera en Europa, y sobre todo en Alemania, que se ha visto especialmente afectada por la crisis energética derivada de la guerra de Ucrania. De igual forma, la combinación del alza de los precios con las restricciones crediticias en el ámbito financiero están repercutiendo de manera negativa en los niveles de inversión empresarial y en el consumo de las familias europeas, generando una pérdida de dinamismo cada vez más evidente.
En el caso concreto de España, los últimos resultados económicos también evidencian un enfriamiento de la economía de nuestro país, especialmente en el ámbito de la industria, como denota el indicador PMI manufacturero, que se ha situado desde abril en zona contractiva.
En cambio, el PMI del sector servicios ha seguido mostrando un comportamiento expansivo, sustentado, sobre todo, por los buenos datos y la creciente solidez del sector turístico y que, a la luz de las previsiones más recientes, seguirá consolidando su recuperación durante la temporada estival, tanto en cuanto a la entrada de turistas, como en el gasto desembolsado por estos.
Con respecto a las últimas cifras del mercado laboral español, el total de afiliados a la Seguridad Social en nuestro país se redujo durante el pasado mes de junio en 118.040 trabajadores, una caída del 0,6% con respecto al mes inmediatamente anterior. En términos interanuales, por el contrario, la afiliación se elevó en 502.896 efectivos adicionales, lo que equivale a un incremento del 2,5%, hasta registrar un montante total de 20.597.244 afiliados al término del sexto mes de 2023.
Trasladando el análisis a las Islas, Canarias también vio reducir sus datos de afiliación en términos mensuales, con una caída de 7.947 trabajadores y que implica un retroceso del 0,9%, tres décimas más intensa que la observada a escala nacional.
Los servicios aglutinaron la práctica totalidad de este descenso, con 7.962 empleados menos al cierre del pasado mes de junio, fruto, principalmente, del retroceso apreciado en “educación” (-4.559 efectivos), en coherencia con la finalización del curso escolar, así como, en menor medida, de las “actividades administrativas” y la “administración pública”, en donde se cifraron caídas de 1.617 y 1.448 individuos, respectivamente.
En cambio, desde un enfoque interanual, las Islas constataron un crecimiento de 35.809 trabajadores (+4,9%), contabilizando un total de 866.713 afiliados al cierre del pasado mes de junio.
La hostelería lideró este ascenso, con 10.096 empleados más, seguido por la actividad comercial, que elevó sus registros en 5.088 individuos adicionales, y por la educación, con 3.833 afiliados más en comparación con idéntico mes del ejercicio precedente.
En cuanto al paro registrado, tanto el conjunto de España como Canarias redujeron sus cifras con respecto al pasado mes de mayo, con un retroceso que alcanzó el 1,84% en el caso nacional (50.268 desempleados menos) y el 1,43% en el Archipiélago (2.533 parados menos).
Desde una perspectiva interanual, Canarias contabilizó un retroceso del 8,53%, 16.225 desempleados menos, superando, así, el descenso cifrado en el conjunto del territorio nacional, en donde la caída fue del 6,66%, lo que se traduce en 191.740 parados menos que en junio de 2022.
Por otro lado, resulta de interés tomar en consideración la evolución observada por los demandantes de empleo que se encuentran en condiciones de inactividad, y en particular aquellos trabajadores con un contrato fijo discontinuo.
En este sentido, los demandantes de empleo ocupados registraron un crecimiento en ambos términos regionales, si bien Canarias constató un repunte relativo mucho más intenso (+15,4%) en comparación con el observado por el conjunto del Estado (+7,2%).
Estos valores, implican aumentos de 4.807 individuos en el primer caso, y de 70.729 demandantes en el segundo, con respecto al mes precedente.
Atendiendo, a continuación, a los datos más recientes sobre el turismo de las Islas, se observa que, según las últimas cifras publicadas por AENA, referidas al pasado mes de junio, Canarias recibió un total de 971.922 visitantes extranjeros al cierre del mes de referencia. Este resultado supone incrementar la presencia de turistas extranjeros en Canarias un 0,3% en relación con el mes inmediatamente anterior, un total de 2.783 visitantes no residentes adicionales.
Con todo, cabe apuntar que si se diferencia por términos insulares, se observa que Gran Canaria ha sido la única isla que aminoró su visitas en relación con el mes precedente, con un descenso de 2.135 turistas (-1,0%), condicionado, en buena parte, por el comportamiento irregular que sigue mostrando el mercado alemán, colectivo que redujo sus entradas en junio un 2,0% y contabilizó 3.131 visitantes menos.
Retomando el dato regional y trasladando el análisis a términos interanuales, la entrada de viajeros foráneos a Canarias se ha incrementado un 5,7% en relación con el mismo mes de junio del ejercicio previo, lo que se traduce en 52.267 viajeros foráneos más que hace un año.
Asimismo, si ampliamos la comparativa con respecto a los datos que se registraban antes de la pandemia, la llegada de turismo extranjero al Archipiélago se sitúa un 1,7% por encima de los resultados que se contabilizaban en el mes de junio de 2019, esto son, 15.834 turistas más.
De este modo, en lo que va de año, Canarias ha acumulado 5,9 millones de turistas extranjeros, un millón más de lo que registró durante los seis primeros meses de 2022 (+20,5%), y 189.768 más que en el mismo intervalo de 2019 (+2,8%).
En vista de los resultados anteriormente mencionados, los principales indicadores económicos evidencian un evidente enfriamiento de la economía global y que resulta cada vez más generalizado, a la espera, además, de conocer los efectos que tengan sobre la economía real el endurecimiento monetario y la evolución que perfilen los precios, pues, aunque se espera que se sigan moderando conforme avance el ejercicio, lo cierto es que se siguen situando muy por encima de los niveles objetivos, especialmente en sus componentes más estructurales.
En lo que atañe a Canarias, debemos aprovechar el inicio de esta nueva legislatura para seguir trabajando por elevar la competitividad de nuestro tejido productivo y consolidar con ello la recuperación de la economía y del empleo, lo que pasa por impulsar la actividad económica, y evitar trabas que puedan suponer dificultades adicionales a las empresas y autónomos del Archipiélago.